Se ha elegido un diseño limpio, pero a la vez simbólico, un corazón, representando en mundo de la salud, donde encajan diferentes piezas de un puzzle, estas piezas pueden simbolizar a todos los que integran el proceso de la Gestión Sanitaria: desde las direcciones, a los profesionales, a nuestros clientes y a todas las herramientas complementarias que necesitamos para el desarrollo de nuestras funciones.
- Dirección
- Profesionales
- Clientes
- Herramientas complementarias
Todo ello forma un conjunto indivisible para poder conseguir todos los objetivos planteados, símbolo del trabajo en equipo, sin dejar de lado ninguno de los protagonistas del proceso gestor.
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